martes, 19 de febrero de 2013

Crónica: Lozoyuela - Las Navas de Buitrago - Sieteiglesias


RUTA: LOZOYUELA – LAS NAVAS DE BUITRAGO – SIETEIGLESIAS
DISTANCIA: 11 KMS
10 de Febrero de 2013
DIFICULTAD: Media


La cita era en la puerta de la iglesia de San Nicolás de Bari de Lozoyuela, templo de siglo XVII, muy reformado. A la hora convenida Ana, la educadora ambiental de El Cuadrón, nos conduce hacia Prados Llanos a través de una subida un tanto dificultosa ya que el camino comparte espacio con la bajada del arroyo Recombo.




Este término municipal está constituido por tres localidades, Lozoyuela, Navas de Buitrago y Sieteiglesias fusionadas en 1975



Tres arroyos recorren esta zona: El Jóbalo, el Recombo y el de la Nava de la Alameda.
Ana, nos mostraba mediante material didáctico, plumas, pelos de jabalí… y sobre el terreno la vegetación y la fauna del entorno serrano. Como fondo excelentes vistas de la Sierra del Rincón.
El paisaje rural todavía mantiene la esencia del pasado, apreciable a través de las dehesas de aprovechamiento colectivo, los prados, potros de herrar, cortijos, caminos y vías pecuarias. Este municipio ofrece al visitante un suave contraste de paisaje llano y montañoso con formaciones graníticas que hace que tenga un suelo poco apto para el cultivo y, desde los primeros asentamientos (siglos X y XI) que dieron lugar a estos pueblos, las extensas dehesas se han dedicado casi exclusivamente a pastos para la cría de ganado. Todos estos elementos combinados con una arquitectura popular perfectamente integrada en el entorno natural, conceden al lugar un equilibrado paisaje y un alto valor ecológico. Fresnos, “fresnitas”, sauces, alisos y encinas flanquean el camino.


Llegamos al Puente del Cura, que como se intuye por el nombre, fue construido para que el párroco pudiera pasar el Arroyo de la Nava de la Alameda hacia Cincovillas a sus oficios religiosos.


El granito y el agua propician estas formas por erosión.



En Navas de Buitrago descansamos mientras dabamos cuenta de las frutas. Pudimos ver con detenimiento un potro de herrar y mas tarde la necrópolis visigótico-medieval.


Esta ruta además del placer del camino, nos ha dejado muchos aprendizajes del medio ambiente y de la historia de la zona.





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